Sí, existe un músculo del placer y es la clave de la satisfacción sexual, no importa sexo o género. ¿No lo conoces? Pues aquí te hablaré de esta maravillosa pieza de la anatomía humana y cómo utilizarla.
¿Cuál es el músculo del placer?
Aunque los médicos lo llaman músculo pubococcígeo (PC), así en singular, no es uno solo sino varios músculos situados en el suelo pélvico, esto es entre el hueso púbico y el posterior o coxis. Y de ahí el nombre: pubo + coccígeo.
Estos músculos son la clave de la salud sexual de cualquier persona, y conocerlos y saberlos controlar te permitirá alcanzar la máxima satisfacción. Son los responsables no solo del orgasmo, sino también de la erección y la expulsión de semen en el caso de los hombres.
Si eres hombre y lo llegas a dominar suficiente, tendrás una erección más dura y podrás disfrutar de numerosos orgasmos sin eyacular. En caso de ser mujer, podrás multiplicar la cantidad e intensidad de tus orgasmos, así como la capacidad de apretar la vagina y darle mayor placer a tu pareja.
Ahora que sabes cuál es el músculo del placer, veamos cómo reconocerlo, para luego hablar sobre las maneras de fortalecerlo y aprender a controlarlo.
Familiarízate con tu músculo del placer
Para que tengas una idea de dónde se encuentra y cómo se siente el PC o músculo del placer, ve al baño y siéntate a orinar. Apenas empiece a salir el chorro, aprieta fuerte y páralo. El músculo que se contrajo es el pubococcígeo. Hazlo varias veces hasta que te quede bien claro cuál es.
Tan pronto te hallas familiarizado con la ubicación y sensación del PC, te darás cuenta de que se contrae no solo para detener la orina, sino cuando tienes orgasmos o pequeños espasmos de placer durante el sexo.
Con el entrenamiento, puedes aprender a controlar esas contracciones, apretando el músculo del placer, para tener orgasmos sin eyacular si eres hombre o, si eres mujer, apretar el pene de tu pareja con tu vagina para darle más placer e incluso evitar que eyacule si no quieres que se venga rápido.
¿Cómo entrenar el músculo PC?
Si durante el ejercicio de familiarización con el músculo del placer tuviste dificultades para detener la orina, es que lo tienes muy débil. Pero tampoco creas que, por haberlo hecho sin problemas, tienes un PC fortalecido. A menos que ya seas una persona multiorgásmica, tendrás que entrenarlo.
Para ello, cada vez que vayas al baño, retén la orina unas 5 veces. Trata de que cada contracción dure al menos 1 segundos al principio, luego 2, 3 y así sucesivamente. El que seas capaz de mantener apretado el músculo pucoccígeo más tiempo, significa que lo estás fortaleciendo.
Más adelante, puedes probar hacer 10 tandas de a 10 contracciones de 1 segundo cada una, dejando 1 segundo de pausa entre cada contracción. Después, trata de extender las contracciones a 2, 3, 4 y 5 segundos. La meta alcanzar los 5 segundos por contracción, 100 veces.
Al hacer este ejercicio todos los días, tu músculo del placer se fortalecerá y tendrás una mayor capacidad sexual. En caso de que seas hombre, justo cuando sientas que te vas a venir durante el sexo, aspira con fuerza por la boca al mismo tiempo que contraes el PC. Si este músculo está lo suficiente fuerte, podrás disfrutar de un orgasmo si eyacular.
Hasta aquí, lo básico sobre el músculo del amor y cómo entrenarlo. Si quieres más documentación, te invito a leer La pareja multiorgásmica del maestro taoísta y gurú sexual Mantak Chia, donde te explica con mucho más detalle cómo entrenar el músculo del amor. Eso, además de darte muchos ejercicios y técnicas sexuales de todo tipo.
¿Te gustó el artículo? Compártelo en tus redes sociales o déjame un comentario para saber tu opinión. Y no dudes en suscribirte al blog para estar al tanto de cada nueva publicación sobre sexo.
Deja una respuesta