Muchas veces se dice que los hombre se encuentran más prestos a la hora de realizar las fantasías sexuales. Aunque esto sea un mito, la verdad es que ellos cuentan con una gran variedad de fantasías para compartir con sus parejas. En este sentido, siempre debes tener en cuenta que antes de hacer cualquier cosa es mejor hablar, concretar las condiciones y luego poner todo en acción.
Las fantasías siempre son más disfrutables y todos los que están participando se sienten completamente cómodos con el papel que están jugando. De lo contrario es mejor no practicarla. Aquí te hablaremos de algunas de las fantasías más comunes entre los hombres.
Hacer un trío es una fantasía recurrente para ambos sexos sin embargo hay matices. Los hombres tienen con frecuencia la fantasía de hacer un trío con dos mujeres, mientras que, generalmente, las féminas prefieren tener sexo con dos hombres. Esta fantasía mezcla factores capaces de potenciar el placer, ya que se fantasea con la opción de poder cambiar de pareja y/o de tener sexo con un desconocido y ambas son muy recurrentes.
Entre los hombres la fantasía de imaginarse ver a su pareja con otros hombres es muy recurrente. Es una práctica que se conoce como “cuckolding” y es una fantasía cada vez más extendida. Al final, se traduce en una infidelidad permitida en la que tú te conviertes en testigo en el mismo lugar de cómo tu pareja tiene sexo con otro hombre o mujer. La diferencia entre el trío y esta práctica es que aquí hay uno que simplemente actuará como un observador.
Vivir un encuentro sexual en lugares públicos es una de las fantasías más populares tanto entre hombres como mujeres. Esta fantasía gusta porque despierta interés por lo prohibido así como permite mantener la tensión por lo que supondría ser descubiertos.
Es muy común imaginarse tener sexo con alguien al que no se conoce y que ni siquiera es de tu entorno próximo pero simplemente es la representación de alguien que te podría atraer mucho físicamente o con alguien con el que te cruzas con frecuencia pero jamás has hablado. Todos tenemos algún amor platónico e ir más allá en la imaginación es algo bastante sencillo. La peor parte de este tipo de fantasías es que son más difíciles de llevar a cabo que otras de las arriba mencionadas.
Ser ‘voyeur’ es otra de las fantasías bastante extendidas entre hombres. En concreto, consiste en observar sin que te vean y sin participar. Por ejemplo, ver a tu pareja masturbarse en secreto. Esta fantasía explora sobre la curiosidad intrínseca del ser humano.
Pedir a tu pareja que se disfrace a la hora de mantener relaciones sexuales y que se meta en ese rol concreto es otra práctica bastante frecuente. Si bien los disfraces más recurrentes son los que suponen algún tipo de uniforme: policia, enfermera, animadora, lo cierto es que las posibilidades son infinitas.
Esta entrada ha sido publicada el 20/04/2021 11:30
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