Quien no sepa que las mujeres tienen la capacidad biológica de experimentar múltiples orgasmos durante una sesión de sexo, probablemente no viva en este mundo. ¿Pero existen los hombres multiorgásmicos? La respuesta es contundente: sí. No solo hay hombres que, por decirlo de algún modo, nacieron con esa capacidad, sino también muchos otros que han aprendido a hacerlo mediante eficaces técnicas para el control de la eyaculación. Increíble, ¿verdad?
¿Cómo funciona el orgasmo masculino?
Aunque el orgasmo tiene sutiles diferencias entre las personas, hay ciertos procesos en común que tienen lugar en todo el cuerpo, más o menos en el orden que sigue:
- movimientos corporales rítmicos
- aumento del pulso, el ritmo respiratorio y la presión sanguínea
- tensión muscular
- una repentina liberación de la tensión acompañada de placer.
Esta última fase incluye contracciones pélvicas, que son la clave del orgasmo masculino. La razón es que, cuando estás a punto de eyacular, se producen contracciones involuntarias del esfinter anal, la próstata se contrae y vacía el semen en la uretra. Entonces, el semen es eyectado por la uretra fuera del pene.
Pero orgasmo no es lo mismo que la eyaculación. Esta última tarda un breve tiempo una vez comenzado el orgasmo. Ello, como es lógico, se debe a que el proceso de expulsión del semen no es algo instantáneo. Pero, en la mayoría de los hombres, el lapso de tiempo entre orgasmo y eyaculación es tan nimio que parecen ocurrir al mismo tiempo.
Además, hay otra diferencia: la eyaculación es fisiológica, y el orgasmo es sicológico. En efecto, el orgasmo consiste en sensaciones y por tanto ocurre en tu mente, aunque lógicamente produce una respuesta física que conduce a la eyaculación.
¿Por qué existen los hombres multiorgásmico?
Ahora bien, vimos que existen los hombres multiorgásmicos, ¿pero cuál es el motivo de esto? ¿No hablamos de que las contracciones pélvicas son las que producen la expulsión de semen, y que son involuntarias?
Pues resulta que un hombre multiorgásmico es capaz de controlar dichas contracciones, hasta el punto de impedir la eyaculación, pero seguir disfrutando de un orgasmo intenso y placentero.
Al no haber eyaculación, no tiene lugar el período refractario. ¿Qué es esto? Es cuando disminuyen rápidamente el placer y excitación sexual, y el pene se relaja. El cuerpo está exhausto y la mente en calma, saciada por la liberación de tensión.
Pero al tener un orgasmo sin eyaculación, el hombre multiorgásmico sigue excitado y con el pene erecto, y puede continuar hasta que decida eyacular o termine físicamente agotado. Esto significa que, en teoría, puede durar toda la noche y dejar satisfecha a su pareja. Aunque en realidad, como ya sabes, el placer durante el sexo no depende solamente de la penetración, sino de otros muchos e importantes factores.
¿Todos los hombres pueden ser multiorgásmicos?
Los hombres multiorgásmicos no son seres especiales, simplemente están más “entrenados”. De hecho, todo el mundo puede aprender a conseguir orgasmos múltiples.
Los ejercicios del suelo pélvico estimulan el conjunto de músculos pubococcígeos que tienen un efecto incisivo en el placer sexual tanto en hombres como en mujeres. Estos se encuentran entre las piernas y se utilizan para el análisis de orina.
Fueron descubiertas por el Dr. Arnold Kegel, un ginecólogo que desarrolló un ejercicio para mujeres que sufrían de incontinencia postparto en la década de 1950. La razón por la que tienen una correlación con el orgasmo es clara: el clímax del placer causa algunas contracciones pélvicas involuntarias e increíblemente agradables y aprender a controlarlas puede prolongar esa sensación de intensa felicidad.
Quienes disfrutan de esta clase de orgasmos son muy pocos, pero hay una buena noticia: cualquiera puede aprender a tenerlos, como podrás gracias multitud de técnicas de control eyaculatorio, de las que hablaré en una próxima entrada.
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